EE UU y Rusia reanudan este jueves los contactos para normalizar sus relaciones diplomáticas

EE UU y Rusia reanudan este jueves los contactos para normalizar sus relaciones diplomáticas

Las conversaciones entre Washington y Moscú para reanudar sus relaciones diplomáticas continuarán este 27 de febrero en Estambul. Diplomáticos estadounidenses y rusos se reunirán con el objetivo de restablecer la normalidad en sus respectivas embajadas después de años de expulsiones de personal y conflictos. Este encuentro —propiciado después de que el plan del presidente estadounidense, Donald Trump, para acabar con la guerra de Ucrania haya dado una posición de mayor fuerza a Rusia— servirá de test para calibrar la confianza entre ambas naciones con las incipientes negociaciones sobre Ucrania de fondo. “Creo que sus resultados dejarán claro con qué rapidez y eficacia podemos avanzar”, ha manifestado el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, durante una visita oficial a Qatar.

El martes pasado tuvo lugar en Riad, la capital de Arabia Saudí, el primer encuentro entre una delegación estadounidense y otra rusa desde que comenzó la invasión de Ucrania. En aquella reunión participaron Lavrov y el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio. Su principal conclusión fue, según Moscú, que ambas partes deben restablecer sus misiones diplomáticas antes de discutir en más profundidad sus intereses geopolíticos.

“Nuestros diplomáticos de alto nivel y nuestros expertos examinarán [este jueves] los problemas que se han acumulado por las acciones de la anterior administración [estadounidense] al imponer obstáculos artificiales a la embajada rusa, y a los que, naturalmente, respondimos de forma recíproca”, ha anunciado Lavrov.

Silencio sobre los minerales

El Gobierno ruso guarda silencio sobre el supuesto acuerdo que ha anunciado el presidente estadounidense, Donald Trump, con el líder ucranio, Volodímir Zelenski, para la explotación de minerales a cambio de protección de seguridad. El mandatario estadounidense aseguró que el pacto garantiza a Kiev “equipamiento militar y el derecho a luchar”, aunque no especificó por cuánto tiempo. “Durante un tiempo, tal vez hasta que tengamos un acuerdo con Rusia”, respondió Trump, que a cambio obtendría la explotación de gran parte de los recursos mineros ucranios, incluidas sus tierras raras.

El portavoz de Putin, Dmitri Peskov, ha intentado minimizar el anuncio pese al anuncio previo del propio Trump. “Aún no hay declaraciones oficiales al respecto, solo escuchamos que Zelenski planea viajar a Washington este viernes”, ha declarado Peskov antes de mostrar su incertidumbre sobre este nuevo giro: “Ya veremos si es el acuerdo mencionado o algo diferente”.

Un día antes de que la Casa Blanca anunciase el pacto con Kiev, Putin reapareció en una entrevista donde ofreció a Washington invertir en la extracción de tierras raras dentro de Rusia y en los territorios que ha ocupado en Ucrania. Sin embargo, esto no había formado parte de las negociaciones, supuestamente, hasta ahora.

“En la reunión de Riad no se abordó esta cuestión [las tierras raras], pero hablamos de cómo los presidentes [Trump y Putin] remarcaron en su conversación telefónica que es necesario eliminar las barreras artificiales al desarrollo de vínculos económicos y de otro tipo mutuamente beneficiosos”, ha manifestado Lavrov.

Moscú sí ha mostrado estos días su rechazo frontal a la idea de desplegar un contingente de paz en Ucrania. Aunque el presidente estadounidense apoyó este martes el envío de tropas bajo un uniforme que guste a ambas partes, Lavrov solo ha cargado contra los países europeos que defienden esta iniciativa. “El enfoque impuesto por los europeos, en primer lugar Francia, pero también Reino Unido, tiene como objetivo calentar aún más el conflicto y detener cualquier intento de enfriarlo”, ha afirmado el jefe de la diplomacia rusa tras tachar este despliegue como “un truco que no resolverá el problema”.

Por su parte, el portavoz de Putin ha sido tan escueto como claro al ser preguntado si el Kremlin aceptaría la presencia de tropas de países amigos, y en particular de China. “No”, ha respondido Peskov.