Sánchez defiende en África la migración ordenada frente al “infierno” de la irregular

Pedro Sánchez ha aprovechado su última intervención pública de la gira que durante tres días le ha llevado por tres países de África Occidental para intentar aclarar la posición del Gobierno sobre la inmigración, objeto en los últimos días de múltiples manipulaciones y ataques. En una comparecencia conjunta con el presidente senegalés Bassirou Diomaye Faye en Dakar, el jefe del Gobierno ha insistido en diferenciar la inmigración ordenada, que es “necesaria y positiva, tanto para los países de origen como los de destino”, de la irregular, “que es directamente un infierno que lleva a situaciones extremas de explotación y desigualdad y, sobre todo, conlleva un riesgo muy evidente de muerte para los jóvenes que caen presos de estas redes”.

En su declaración, en la que no se han admitido preguntas, Sánchez ha elogiado la cooperación de Senegal en la gestión de los flujos migratorios, que se ha comprometido a reforzar, y ha defendido su política de extender y ampliar los acuerdos de migración circular, mediante la incorporación de nuevos sectores productivos y la inclusión de programas de capacitación profesional. “La migración regular nos conviene a todos”, ha insistido. “Nos vacuna frente a quienes hacen de la irregular un negocio, como las mafias, y frente a quienes la utilizan como excusa para extender el odio y la xenofobia en nuestras sociedades”, ha añadido, en alusión implícita a la extrema derecha.

El presidente ha reiterado que la seguridad es fundamental para el bienestar de la sociedad, pero no ha relacionado las redes que trafican con seres humanos con las yihadistas como hizo el miércoles en el Instituto Cervantes de esta ciudad, y tampoco ha mencionado la demanda de que los países africanos admitan la devolución de los inmigrantes que llegan irregularmente a España, que entonces calificó de “imprescindible”. Ante su anfitrión, ha preferido guardar silencio sobre un asunto que resulta políticamente muy delicado para las nuevas autoridades senegalesas, que no han admitido ninguna repatriación de sus nacionales desde que llegaron al poder la pasada primavera.

Al final de su discurso, el jefe del Gobierno español ha hecho un “balance muy positivo” de su gira por Mauritania, Gambia y Senegal, a los que ha calificado de “socios y amigos”, y ha sintetizado los objetivos de su viaje: agradecer el “gran esfuerzo” que los tres gobiernos están haciendo para frenar la migración irregular, mostrar la disposición del Ejecutivo español para crear “nuevas oportunidades de desarrollo económico” en estos países; contribuir a reforzar sus capacidades en materia de seguridad y “ofrecer alternativas” a la migración irregular, con los acuerdos de migración circular.

Por su parte, Faye ha agradecido a Sánchez la acogida a los senegaleses que residen en España (más de 80.000), ha expresado su “preocupación por las salidas masivas [de inmigrantes] a partir de las costas senegalesas” ―sugiriendo que no son necesariamente senegaleses― y ha llamado a “luchar contra las causas profundas de este fenómeno”, promoviendo el desarrollo de los países de origen y abriendo vías de migración regular. Tampoco una palabra sobre la devolución de irregulares.

Pese a los esfuerzos de Sánchez por ser didáctico, el ruido mediático ha rodeado desde el principio este viaje. Algunos medios aseguraron que había prometido en Mauritania regularizar a 250.000 inmigrantes, lo que es falso. El bulo surgió después de que un alto cargo que maurparte de la comitiva oficial asegurase que, según un estudio que atribuyó al Banco de España, España necesita entre 200.000 y 250.000 trabajadores anuales para cubrir la demanda de su mercado laboral en los próximos años. Pero ni Sánchez mencionó nunca esta cifra ni dicho alto cargo la vinculó en ningún momento con los acuerdos de migración circular.

Estos son mucho más modestos: en 2023 se acogieron a esta fórmula 20.500 personas, en su mayoría temporeras marroquíes para la recogida de la fresa en Huelva, mientras que el cupo de Senegal, único de los tres países visitados por Sánchez en el que ya se aplicaba dicho sistema, fue de solo 151 trabajadores.

Ello sirvió, sin embargo, para que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, acusara a Sánchez de provocar un “efecto llamada” a la inmigración irregular con su periplo africano y para que Vox pidiese la comparecencia en el Congreso de la vicepresidenta Yolanda Díaz y de tres ministros para dar cuenta del supuesto compromiso con Mauritania de regulación masiva de inmigrantes.

Fuentes de La Moncloa negaron que la mención que hizo Sánchez al “imprescindible” retorno de los inmigrantes llegados irregularmente a España fuese una rectificación ante las críticas del PP, como sostiene dicho partido. Las mismas fuentes aseguraron que el Gobierno tiene “una hoja de ruta clara, seria, responsable, solidaria y respetuosa con los derechos humanos” sobre el fenómeno migratorio y que, a lo largo de su gira africana, el presidente ha ido exponiendo sus elementos. El último de ellos fue el de las devoluciones “dentro de la legalidad”. Las mismas fuentes contrapusieron este enfoque “multidisciplinar”, que incluye la cooperación con los países de origen y tránsito, la apertura de vías de migración circular o la lucha contra las mafias del tráfico de personas, con el “enorme ejercicio de irresponsabilidad del PP” que, con sus declaraciones, “fomenta el discurso del odio, subrayaron. Fuentes gubernamentales añadieron que el discurso del presidente en el Cervantes estaba escrito con antelación y “no se cambió una coma”, aunque en contra de lo habitual no se facilitó a la prensa.

Sánchez ha iniciado la última jornada de su gira de tres días por África Occidental con un desayuno empresarial en Dakar, al que han asistido una veintena de directivos de empresas españolas con intereses en Senegal, así como representantes de la Cámara de Comercio local y de la Compañía de Financiación del Desarrollo (Cofides). Posteriormente se ha reunido con el presidente Faye y con su primer ministro, Ousmane Sonko, verdadero hombre fuerte del país.

La Moncloa ha querido dar a la gira africana de Sánchez, que se inicio el martes en Nuakchot (Mauritania), carácter multidimensional. En Mauritania acordó elevar la relación bilateral con dicho país y celebrar en 2025 la primera Reunión de Alto Nivel (RAN), un formato reservado para los socios más importantes de España; en Gambia, visitó el destacamento de la Policía y la Guardia Civil que lucha contra las mafias que trafican con inmigrantes; y en Senegal lanzó la iniciativa Alianza África Avanza, para impulsar inversiones de empresas españolas que promuevan el desarrollo de la región y empleo para los jóvenes, además de invitar al presidente Faye a una visita oficial a Madrid para la que aún no hay fecha. En los tres países ha firmado acuerdos de migración circular, que incluyen la formación y capacitación para empleos de temporada que reclama el mercado español.