Saraguro tiene una especie de semillero de ‘influencers’ indígenas

Saraguro tiene una especie de semillero de ‘influencers’ indígenas

En la cotidianidad de Saraguro se puede encontrar en sus calles a jóvenes cargando micrófonos, cámaras, trípodes u otros equipos. Este cantón tiene una especie de semillero de YouTubers indígenas que conquistan las redes sociales.

Todo empezó por el 2018 con Nancy Risol, una adolescente oriunda de la comunidad de Gera, quien hacía videos disfrutando de la vida en el campo y con pocas cosas materiales. El contenido lo difundía en Facebook y YouTube.

Esos espacios la catapultaron a la fama. En junio del 2019 obtuvo el primer botón de plata del portal YouTube tras alcanzar los primeros 100 000 suscriptores y actualmente tiene 2,6 millones. Mientras que en Facebook supera los 5,7 millones de seguidores.

La joven celebró este hito con un video que se volvió viral y hasta medios internacionales empezaron a hablar del ‘fenómeno Nancy Risol’. Incluso, el contenido digital fue analizado por una estudiante de la Universidad Técnica de Ambato en su tesis de grado.

Esa evolución y el misterio de cuánto gana un ‘influencer’ digital despertó en los jóvenes del pueblo el deseo de involucrarse en la producción audiovisual. Así empezaron a aparecer nuevos ‘teams’ o grupos.

La productora Activos, de Manuel Morocho, nació en el 2019 ante la falta de empleo familiar. Antes de eso su esposa, Tania Sigcho, colaboraba en el canal Ashukito, de su primo Geovanny Tene. Allí aprendió sobre guion, producción, actuación y otros temas. Con esa experiencia la pareja desarrolló su propio programa.

Los grupos tienen varios temas en común: están integrados por esposos, hermanos, primos, sobrinos, padres y abuelos, y entre los ‘teams’ son familia. Cada uno tiene más de tres canales y manejan contenido variado de humor, reflexión y actividades de la cotidianidad de su cultura.

Por ejemplo, en Activos ocho jóvenes forman parte del elenco de los programas Jushito, Soy Tania, Reflexiones Tania, Estefany y Jushito Comunica. A los ocho meses de estar al aire consiguieron los botones de plata de YouTube de los tres primeros canales.

Pedro Tene, de 26 años, tiene los programas Ahora Pit y El Aparato, pero hace menos de un año también administraba los canales de Nancy Risol, Mary Guamán, Uvitas y Edis Vlogs, quienes ahora producen sus propios contenidos.

Cualquier parque, restaurante, calles, potreros, sembríos, casas u otros espacios sirven como locación. Para los contenidos recopilan anécdotas de los mayores para reproducirlos en comedia.

Desde hace seis meses Tene es Arquitecto, pero empezó a trabajar produciendo videos en el 2012. En principio se filmaba dibujando y al cabo de un año ganó los primeros USD 5. De allí le contó a su primo Geovanny Tene que era posible generar ingresos desde las redes sociales.

Juntos crearon un programa de bromas pesadas que filmaban en Cuenca, pero al tiempo lo dejaron porque no pegó y los compañeros de la universidad se burlaban de ellos. Tras esa experiencia se separaron y Tene optó por hacer documentales de su cultura Saraguro.

Geovanny Tene creó el canal Adonis que muestra –en comedia- la vida de un niño (Ashuquito) desde su cultura con su propia identidad, vestimenta y forma de vida.

En cambio, Pedro Tene invitó a Nancy Risol a formar parte de su equipo con un contenido similar, pero con adolescentes. En ese espacio creció Risol y obtuvo el botón de plata. “Me sentí feliz por ese reconocimiento”, dijo Tene.

A partir de este fenómeno aparecieron nuevos influencer en el cantón y comentarios sobre las ganancias que dejan los videos, dice Tene.

Morocho no lo desconoce, pero contó que depende de la calidad de los productos, las visualizaciones y número de suscriptores. “Hay videos que pegan y otros no, y los ingresos mensuales varían entre USD 100 o más de USD 30 000”, comentó Tene aunque no le agrada hablar de montos.

Las ganancias se distribuyen en porcentajes y también se paga a los colaboradores extras. Los productores dicen que con esta actividad generan empleo, aunque sea temporal. Tene viene de una familia muy humilde de nueve hermanos.

“Teníamos muchas limitaciones, pero en estos años he ayudado en la educación de mis hermanos, a mejorar la vivienda de mis padres y las condiciones de vida”.