Vacunarse es una responsabilidad colectiva

Vacunarse es una responsabilidad colectiva

“Tenemos las vacunas suficientes”. Es una frase que ha dicho en repetidas ocasiones la ministra de Salud, Ximena Garzón. Además, ha invitado a la población que aún no se ha inmunizado para que cumpla con este deber ciudadano.  

La experta en biotecnología, Jhommara Bautista, recuerda que, desde siempre, las vacunas han permitido salvaguardar la vida de los seres humanos. Y sostiene que el covid-19 permitió evidenciar la importancia de vacunarse. 

¿Por qué es necesario? “Al vacunarme ayudo a mi sistema inmune a crear anticuerpos que me van a proteger de los síntomas graves de la enfermedad, van a evitar que pueda llegar a hospitalizarme o incluso a morir”, explica la médica.  

Si bien la vacuna no evita el contagio, Bautista señala que la probabilidad de contraer el coronavirus y contagiar a los demás es mucho menor. “Entonces la vacunación es un acto de solidaridad con los demás para salvar sus vidas”. 

Más allá de la ‘inmunidad de rebaño’

Bautista dice que para reducir el número de contagios y evitar que aparezcan más variantes se requiere vacunar a muchas más personas. 

“No lo veamos solo por el hecho de alcanzar la inmunidad de rebaño, veámoslo desde la oportunidad de seguir viviendo, trabajando, estudiando, de tener esa vida normal que tanto queremos, pero desde los cuidados, prevención y la protección que nos dan las vacunas”.  

Hasta el 30 de noviembre, en Ecuador se ha aplicado la primera dosis anticovid a 13,2 millones de personas. Eso significa el 82,54% de cobertura. Con segundas dosis se ha llegado a 11,3 millones, que implica el 70,76% de cobertura. De acuerdo con el Vacunómetro también se han aplicado 421 032 dosis de refuerzo. 

La experta en biotecnología pide recordar que la inmunidad de las vacunas va disminuyendo con el paso de los meses. 

“Una dosis de refuerzo es sumamente importante para continuar protegidos y cuidando de los demás”. 

El 100% de la población de 80 años o más ha recibido ambas dosis. Los porcentajes van entre 87 y 77% en los rangos etarios inferiores hasta el de 18 a 24 años. 

El 56,59% de los niños y jóvenes de 12 a 17 han recibido dos dosis, mientras que el 19,12% de niños de 5 a 11 ya cuentan con su segunda fórmula. 

Bautista recuerda que ya no solo los adultos mayores tienen riesgo de morir. “Los jóvenes e incluso los niños también lo tienen”, explica. 

Mantener la bioseguridad

La Organización Mundial de la Salud (OMS) enfatiza en que estar vacunados no significa dejar de lado las medidas de precaución. 

“Las vacunas seguras y eficaces son una herramienta que cambia las reglas del juego. Sin embargo, en el futuro inmediato debemos seguir usando mascarillas, limpiándonos las manos, ventilando bien los espacios interiores, manteniendo el distanciamiento físico y evitando los lugares concurridos”.