Cuerpo de niña de nueve años fue encontrado en un contenedor de basura en Brasil: la madre es la principal sospechosa; investigan tortura y homicidio

El viernes 9 de agosto, un hecho desgarrador sacudió a la ciudad de Guaíba, en la Región Metropolitana de Porto Alegre, Brasil, con el hallazgo del cuerpo sin vida de Kerollyn Souza Ferreira, una niña de apenas nueve años, dentro de un contenedor de basura. La principal sospechosa de este crimen es la madre de la menor, quien ha sido detenida por orden judicial mientras avanza la investigación.

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Matheus Ferreira, padre de Kerollyn, compartió con los medios que desconocía la crítica situación de su hija, quien aparentemente dormía en las calles y se alimentaba de lo que encontraba en la basura. 

"Era una situación de la que yo no era consciente, no estaba consciente de lo que estaba pasando", reveló Ferreira, evidenciando la desconexión con la vida diaria de su hija, quien residía con su madre y hermanos en Guaíba mientras él vive en Santa Catarina.

La niña, que había vivido con su padre durante los primeros meses de su vida y nuevamente cuando tenía siete años, regresó con su madre a pesar de las preocupaciones expresadas por Ferreira. 

"Yo siempre le dejé claro a ella (la madre): 'Hombre, si no quieres cuidar a la niña, si no tienes paciencia, entonces dámela a mí, que se quede conmigo, Yo la cuidaré y no será un problema'. Pero ella nunca lo quiso, nunca lo aceptó", explicó el padre.

Detalles de la investigación judicial

La Policía Civil, al solicitar la detención temporal de 30 días de la madre, argumentó que había indicios de que la mujer había torturado a su hija, llevando a su muerte. El Ministerio Público, representado por el fiscal Fernando Sgarbossa, sostuvo que existen pruebas de la implicación de la madre, "ya sea por acción u omisión", en un contexto de conflictos no resueltos que escalaban con el tiempo.

El Tribunal de Justicia ha recibido declaraciones y documentos que apuntan a que Kerollyn fue sometida a severos sufrimientos físicos y mentales. El juez João Carlos Leal Júnior calificó los hechos como malos tratos, abandono de persona incapacitada y tortura.

Sin signos visibles de violencia pero con sospechas de negligencia grave

Aunque el perito confirmó que inicialmente no había signos de violencia en el cuerpo, la Policía espera los resultados de las pruebas toxicológicas para esclarecer la causa exacta de la muerte. Se reveló que la madre había administrado medicamentos controlados a Kerollyn sin asesoramiento médico. 

Tras descubrir que la niña no estaba en casa, la madre volvió a dormir, sin mostrar sorpresa ni emoción cuando la Policía le informó del hallazgo del cuerpo, lo que intensificó las sospechas sobre su comportamiento.

Reacciones comunitarias y seguimiento del caso

Vecinos cercanos al lugar del hallazgo informaron a 'RBS TV' que Kerollyn vivía en las inmediaciones de donde fue encontrada. El Consejo Tutelar del municipio ya estaba al tanto de la situación de la niña, con un expediente abierto por violaciones de derechos. La investigación continúa con la revisión de grabaciones de seguridad y testimonios adicionales.

MARÍA EDUARDA ELY

O Globo (Brasil) / GDA

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*Este contenido fue escrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basada en información de O Globo (GDA), y contó con la revisión de un periodista y un editor.