Por el sí en la pregunta B: Javier Orti, del partido Avanza, señala que la consulta busca destrabar la posibilidad que el país debería tener para la extradición

Por el sí en la pregunta B: Javier Orti, del partido Avanza, señala que la consulta busca destrabar la posibilidad que el país debería tener para la extradición

El partido Avanza, lista 8, es una de las organizaciones políticas que promueven la opción del sí a las once preguntas de la consulta popular y referéndum del 21 de abril. Javier Orti, presidente del partido, habló de cómo, a su criterio, la extradición de ecuatorianos que cometan delitos en otros países puede contribuir a erradicar problemas que afectan a Ecuador.

El dirigente aclaró que el respaldo a la consulta no significa un apoyo al presidente Daniel Noboa y a su Gobierno, sino que se busca establecer herramientas jurídicas para beneficio del país.

Avanza promueve el sí a toda la consulta y referéndum. ¿Por qué?

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Es una posición netamente político-partidista, en razón de lo que necesita hoy el país. Si bien es cierto, las once preguntas no es que solucionan de manera inmediata todos los problemas que tiene el país. Pero, por supuesto, se convierten en una herramienta eficiente contra temas puntuales como la inseguridad y, por supuesto, la falta de empleo y la seguridad jurídica. Esa es nuestra razón. Son preguntas que, si bien es cierto algunas podían resolverse con otros caminos, pero es lo que urgentemente necesita el país. No es un apoyo a un Gobierno, no es un apoyo a una candidatura, no es un apoyo personal a nadie.

Con el tema de la extradición, ¿qué es lo positivo que ustedes ven?

Lastimosamente, las consultas populares en este país se han vuelto extremadamente politizadas; es decir, no es más que una legitimación del Gobierno de turno que lo plantee, y es una lástima porque se desperdician recursos, en el caso que se pierda la consulta. Por suerte, ante el clamor de la ciudadanía en cuanto a la lucha contra la corrupción, el presidente Daniel Noboa optó recuperar una de esas importantes preguntas de la anterior consulta, que es la extradición. Hemos evidenciado en las décadas pasadas que cualquier involucrado en actos de corrupción lo primero que hacen es huir del país, porque no existe la figura de la extradición por peculado, cohecho, terrorismo o narcotráfico y demás. Con la consulta se trata de destrabar esa posibilidad que deberíamos tener para la extradición.

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Las voces en contra dicen que esto no hará que desaparezca el crimen organizado y ponen como ejemplo a México. ¿En qué medida puede apoyar la aprobación de la extradición?

Es lo que decía al inicio. Estas preguntas no son la barita mágica, no son la solución inmediata a los problemas del país. Por ejemplo, no por el hecho de permitir que las Fuerzas Armadas entren a las cárceles o manejen de mejor manera el tema de las armas, quiere decir que al día siguiente de la consulta popular no va haber inseguridad. Las preguntas son herramientas jurídicas para erradicar un sinnúmero de problemas que tenemos, como son el narcotráfico, corrupción, crimen organizado, etc. Pero si no tenemos estas herramientas, poco o nada podemos hacer.

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¿Al plantear la extradición se están reconociendo las deficiencias del sistema judicial de Ecuador?

Por supuesto. Y no solo esa pregunta; por ejemplo, lo del arbitraje internacional. Evidentemente, y con todo lo que está pasando con respecto a los casos Purga, Metástasis, Plaga y todos los demás, lo que se está evidenciando es la fragilidad e inseguridad jurídica que tenemos en el país. Y es triste, porque absolutamente nadie a logrado proponer una solución a esta situación: ¿cómo cambiamos el sistema judicial del Ecuador? ¿Cómo volvemos a creer en la justicia? Cómo volvemos a tener confianza en nuestra justicia, si vemos que organizaciones políticas, vinculadas al narcotráfico, tienen influencia sobre el sector judicial. Todo lo que estamos viendo ahora desde la Fiscalía. Ahí sí soy frontal: estás preguntas (de la consulta) sí son una traducción inmediata a la desconfianza que tiene el pueblo ecuatoriano en nuestro sistema judicial. Eso no quiere decir que con la aprobación de las preguntas el sistema judicial va a funcionar; al contrario, le estamos dando la espalda. Pero eso es un aliciente para que algún rato nos sentemos todos a conversar sobre el sistema judicial y cómo reformar la justicia en el Ecuador.

Usted decía que las consultas populares se han convertido en una especie de termómetro de la aceptación del presidente de turno. En ese sentido, ¿si Daniel Noboa ahora goza de una mejor aceptación de Guillermo Lasso, es más probable que esta vez sí pase la pregunta de la extradición?

Creo que dependemos mucho del “timing” político. Dependemos mucho de los efectos, que como mandatario ha tomado Daniel Noboa con respecto al IVA. Dependemos de cómo se está administrando la justicia. Sí, en realidad, lastimosamente así resulta. Pero recordemos que las consultas populares son parte de los mecanismos de democracia directa que tenemos y como ciudadanos responsables, y dirigentes políticos responsables, debemos asumir esto con responsabilidad. Yo trato de evitar los debates de que se deba apoyar una consulta en función del apoyo o no a un Gobierno. Avanza no tiene ningún tipo de acuerdo con el Gobierno, no tenemos injerencia. (I)

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