Incendian iglesia en Chile en la primera protesta del año

Incendian iglesia en Chile en la primera protesta del año

Santiago -

Una iglesia destinada a los servicios religiosos de la Policía chilena fue incendiada este viernes durante la primera protesta del año en Chile para reclamar reformas sociales.

Ubicada en las cercanías de la Plaza Italia de Santiago, epicentro de la mayoría de protestas que estallaron en octubre del año pasado, la iglesia San Francisco de Borja comenzó a arder después de que fuera atacada por un grupo de encapuchados, afirmaron testigos.

La iglesia, antigua capilla o iglesia del Sagrado Corazón de Jesús del Hospital San Borja, es un templo católico neogótico de 1876, que actualmente está destinado al servicio religioso de Carabineros de Chile.

Grandes columnas de humo eran visibles desde varios puntos del centro de Santiago, mientras que Carabineros de Chile lamentaron el ataque al templo, como varios edificios patrimoniales ubicados en las cercanías de la Plaza Italia que han sido incendiados desde que estallaron las protestas sociales en Chile el 18 de octubre.

“Lamentamos profundamente informar que la iglesia institucional San Francisco de Borja, donde fueron despedidos nuestros más de mil mártires, es incendiada por una turba de vándalos”, dijo la institución en un mensaje en su cuenta oficial de Twitter.

El templo fue construido en 1876 y entregado a Carabineros hace más de cuatro décadas. Los manifestantes sacaron el mobiliario del interior y con él incendiaron grandes barricadas en el exterior del lugar.

La iglesia comenzó a arder pocas horas después de que se iniciara una nueva manifestación, especialmente masivas en este lugar los viernes. La semana pasada, el cine Arte Alameda también fue incendiado, al igual que el edificio de una universidad.

Grupos de encapuchados se enfrentaron violentamente con la policía en los alrededores de la iglesia, mientras que en otros lugares manifestantes protestaban de manera pacífica en reclamo de mayores reformas sociales y en contra del gobierno de Sebastián Piñera.

Las manifestaciones se saldan hasta ahora con 29 muertos y han dado paso a un plebiscito en el que el 26 de abril los chilenos decidirán si cambian o no la Constitución que se mantiene como herencia de la dictadura de Pinochet. (I)