Kirchner tiene pendientes otros tres juicios tras la condena por corrupción

Kirchner tiene pendientes otros tres juicios tras la condena por corrupción

Cristina Kirchner está presa en su casa por corrupción. Desde el martes cumple una pena de seis años de cárcel tras haber sido declarada culpable de defraudar millones al Estado argentino a través de la adjudicación discrecional de obra pública en la provincia patagónica de Santa Cruz, en la llamada Causa Vialidad. El peronismo ha salido a las calles para criticar lo que considera la proscripción de su dirigente a meses de las elecciones legislativas, pero en el horizonte de Kirchner asoman otros tres juicios en su contra que avanzan a gran velocidad. El primero, de mantenerse la fecha prevista, comenzará el próximo 6 de noviembre.

Causa ‘Cuadernos de las coimas’

Es la causa por presunta corrupción más grande de la historia de Argentina y también la más compleja de las que enfrenta Kirchner. La expresidenta argentina es sospechosa de encabezar una asociación ilícita para la recaudación de coimas (sobornos) de contratistas de obras públicas. Las operaciones de esta supuesta trama de corrupción fueron minuciosamente registradas en cuadernos por Oscar Centeno, un chófer de altos funcionarios kirchneristas.

La investigación del diario La Nación que reveló la existencia de esos cuadernos en 2018 provocó un terremoto político y judicial en Argentina, con sonadas confesiones de empresarios de la construcción que admitieron haber pagado sobornos para ganar contratos de obra pública y funcionarios que aceptaron que los habían cobrado. La causa se empantanó durante años, pero en 2024 la Corte Suprema ordenó darle curso y el tribunal fijó el inicio del juicio para el próximo 6 de noviembre. En total, el número de imputados asciende a 74 y los jueces escucharán a más de 600 testigos. Se prevé que las audiencias se extiendan alrededor de tres años.

Causa Hotesur-Los Sauces

Esta causa tiene muchos puntos en común con la de Vialidad, por la que Kirchner fue condenada a seis años de cárcel. La expresidenta deberá responder ante los jueces por las acusaciones de lavado de dinero y de admisión de dádivas a través de las sociedades inmobiliarias Hotesur y Los Sauces. Según la fiscalía, el empresario de la construcción Lázaro Báez retribuía a la familia Kirchner con el pago de millones de pesos en concepto de alquiler de habitaciones de hoteles de su propiedad como contraprestación de la adjudicación irregular de obras públicas en la provincia de Santa Cruz. Otro de los empresarios acusados, Cristóbal López, es sospechoso de haber recurrido a la misma estrategia a cambio de un trato de favor para sus negocios.

En 2021, un tribunal federal sobreseyó a Kirchner y a otros acusados por inexistencia de los delitos imputados, pero el año pasado la Cámara Federal de Casación Penal revocó el fallo. La Corte Suprema resolvió hace seis meses que se eleve a juicio oral, pero aún no se ha fijado fecha. Además de la expresidenta, también está imputado en esta causa su hijo, Máximo Kirchner.

Causa Memorándum de Irán

Kirchner deberá responder también en los tribunales por la firma de un Memorándum con Irán en 2013. Según la versión oficial, el acuerdo entre las autoridades de ambos países contemplaba la creación de una Comisión de la verdad para analizar la causa sobre el atentado contra la mutual judía AMIA de 1994 y abría la puerta a interrogar a los iraníes sospechosos del atentado. El fiscal que investigaba ese atentado, Alberto Nisman, contradijo al Gobierno y aseguró que se trataba de una maniobra para “fabricar la inocencia” de los autores del ataque que causó 84 muertos y hacer que Interpol levantase las órdenes de captura que pesan sobre ellos. Cuatro días después de denunciar a la entonces presidenta por encubrimiento, Nisman apareció muerto en su casa con un tiro en la cabeza. La Justicia considera que fue asesinado por su denuncia.

El memorándum nunca entró en vigor —no fue siquiera aprobado por el parlamento iraní— y la causa fue sobreseída en 2021. Sin embargo, dos años después, se reabrió a pedido de un tribunal superior y ahora está a espera de juicio. Se prevé que testifiquen más de 300 personas.