Pago del bono navideño lleva a los quiteños a buscar regalos y eso activa ventas en negocios
RADIO ANTENA PENINSULA
Diciembre 18, 2024
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Júnior Torres buscaba regalos para sus dos sobrinos el lunes en el centro de Quito. Miraba un triciclo, una moto de juguete y un andador.
Por el triciclo le pedían $ 35 y le pareció accesible, pues señaló que en otro lugar le dejaban hasta en $ 50. Caminaba con un familiar por los pasillos del centro comercial Pasaje Sanguña.
Trabaja preparando bebidas en un hotel, el pasado viernes ya le pagaron el decimotercero con lo que ese dinero lo destinará -alrededor de $ 200- para los gastos por Navidad.
No pasará con su familia en Nochebuena porque debe laborar.
El decimotercer sueldo o bono navideño es uno de los beneficios de los trabajadores. Lo reciben quienes están bajo relación de dependencia. El rubro es correspondiente a la doceava parte de las remuneraciones que hubiere percibido el trabajador entre el 1 de diciembre del año pasado y el 30 de noviembre del presente.
Hasta el próximo 24 de diciembre los empleadores tendrán que pagar a sus trabajadores el decimotercer sueldo.
En el sur de la capital, Nelson Preciado acompañaba a su esposa, quien buscaba adornos navideños, a media cuadra de la avenida Rodrigo de Chávez.
Él espera que esta semana le depositen su decimotercer sueldo para hacer algunos gastos para la Navidad.
El año pasado se jubiló, pues era chef y ya tiene pensado destinar unos $ 300 para la época navideña.
Mientras su esposa, Cecilia Puente, escogía unos gorros blancos y rojos, contó que ese dinero lo iba a destinar para diversos obsequios.
Cecilia tomó en la mano uno y se quedó pensativa, pues la vendedora le comentó que valía $ 1,50. Lo siguiente será adquirir regalos para sus hijos y nietos.
En el norte de la urbe, Eduardo Franco, un guardia de seguridad, recorría los puestos de venta de artículos navideños ubicados en uno de los parqueaderos del parque La Carolina.
El hombre buscaba unos gorros que los compró a $ 1,50, de los cuales señaló estaban económicos, pero cotizaba otros productos como luces que es lo que le llamaba la atención. En su casa pondrá un árbol navideño y habrá una cena.
Sostuvo que costeará los gastos con su sueldo, pues no recibe el decimotercero. “Ahí hacemos alcanzar el sueldo”, dijo con humor.
Tenía previsto continuar viendo objetos navideños, pero en otros locales más al norte.
Nacimientos, árboles navideños, luces, guirnaldas, campanas es lo que vende Maribel García en uno de los locales comerciales del parque La Carolina.
A pocos metros de donde se rezaba la novena contó que la venta no estaba tan buena como en años pasados, porque siguen casi con el mismo stock.
Actualmente hay días en que vende menos de $ 20 y el año pasado al día la venta era de unos $ 120, expresó.
En artículos pequeños ganan entre $ 0,10 y $ 0,20; en árboles, de $ 3 a $ 5. Lo más demandado fueron luces que se recargan con el sol, pero ya se agotaron.
“Antes no teníamos tiempo ni de comer, ahora hasta sueño da de lo que no se hace nada”, mencionó la mujer que vestía un mandil celeste.
Para Cristian Castillo, secretario del centro comercial Granada, en el centro histórico, donde se pueden encontrar ropa y zapatos, el movimiento comercial no era el esperado. Lo atribuyó a los apagones, porque no pueden atender durante toda la jornada.
Manta festeja la Navidad con un árbol que funciona con energía solar
Para que las ventas por la Navidad sean buenas indicó que cada local, más de 400, deberían hacer entre $ 200 y $ 300 al día. Ahora venden $ 40 o $ 50. El pasado fin de semana mejoró en un 30 %. Una camiseta puede valer $ 5, un pantalón $ 10.
Verónica Chuquiano, quien tiene un local de venta de artículos navideños en el sur de Quito, señaló que suelen tener ventas de $ 30 de 08:00 a 21:00, que es su horario de atención al público, por lo que dijo que el movimiento estaba regular.
En su local hay demanda de ropa del Niño Jesús, cunas para figuras de santos, sahumerio.
Esperaría vender unos $ 100 para que el día esté bueno. Lo máximo que ha vendido son unos $ 50, pero tiene la esperanza de que a pocos días de la Nochebuena la situación mejore. (I)
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